Chiapas ante el calor: prevención, educación y acción
Chiapas enfrenta uno de los retos ambientales más exigentes de los últimos años: el aumento de las temperaturas extremas. De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, más de 20 municipios del estado registran temperaturas que superan los 40 grados Celsius. A esto se suman los efectos colaterales del calor: incendios forestales, problemas de salud pública y riesgos en la cadena alimentaria.
Sin embargo, en medio de este panorama desafiante, también se observan acciones coordinadas que merecen reconocimiento. Por un lado, el descenso de Chiapas al lugar número 12 en la lista nacional de incendios forestales, según datos de la Conafor, demuestra que la prevención, la educación comunitaria y la participación de brigadas están dando resultados. Si bien no es momento de cantar victoria, sí lo es para fortalecer estrategias y sumar esfuerzos desde los municipios hasta los ejidos.
Por otro lado, la capacitación en temas de salud también avanza. El curso de manejo higiénico de alimentos que se imparte a locatarios de los mercados de Tuxtla Gutiérrez, impulsado por la Dirección de Verificaciones y Clausuras, es una respuesta clave para evitar enfermedades gastrointestinales en esta temporada. Porque en tiempos de calor extremo, la seguridad alimentaria también es un tema de salud pública.
El aumento de temperatura no es solo un fenómeno natural, sino una señal de alarma que nos exige respuestas colectivas. La ciudadanía debe mantenerse informada, hidratarse adecuadamente, evitar actividades al aire libre en horarios de riesgo y reportar cualquier conato de incendio. Las autoridades, por su parte, deben continuar reforzando la vigilancia ambiental, promover campañas de concientización y garantizar el cumplimiento de medidas sanitarias.
Chiapas está en un momento decisivo. Que el termómetro no sea solo una estadística, sino un llamado a actuar con responsabilidad. El clima cambia, pero también nosotros.