Tubo de Ensayo, por René Delios ·
Una serie de fotografías fueron tanto difundidas como cuestionadas, por los simpatizantes o adversarios de los protagonistas, y más aquellos que han mostrado la intención de gobernar la entidad -o ser ser legisladores o munícipes-, por lo que buscan ser precandidatos en Morena, y entrarle a la encuesta o consulta que ese partido realizará para la candidatura a la presidencia o una de las nueve gubernaturas a contender en 2024, incluyendo a Chiapas.
El caso es que una vez “subidas” las imágenes o gráficas de los susodichos, reconocimientos y ataques se manifestaron este fin de semana, en los muros de quienes tienen ya “su gallo”.
Muy aparte de ello, pues todos los aspirantes están en su derecho, vuelve a demostrarse la tendencia por la guerra sucia, el denostar al adversario como si fuera enemigo, y que al final de cuentas exhibe al morenismo local, con este tipo de militancia que no respeta la pluralidad y no mantiene el nivel en el discurso pues, el mandatario mexicano, es el primer agraviado por ese tipo de inquina que le aplican sus –ahora sí- enemigos.
Por eso se insiste que el discurso como el debate, deben ser claros, precisos, sin demagogia.
Chiapas es una entidad con rezagos sociales serios, tanto innegables como injustos; no se van a resolver ni en el presente y ni en el siguiente sexenio: el que llegue con ese planteamiento como bandera de campaña, miente.
La entidad tiene áreas -por no decir zonas- equivalentes a tribus africanas, en dónde la pobreza es extrema, y en las que se están canalizando los proyectos que un buen critican, pese a que se da un cumplimiento de ley -y humanitario- para que esos mexicanos, accedan a mejores estadios de vida a los que tienen derecho y a los que -solo explicable con la corrupción- no les dieron acceso tal cual debió ser desde años ha.
Pero a eso los nuevos reaccionarios, le llaman populismo, pese a que ese tipo de programas, son crío del PRI hará setenta años, y lo siguió practicando el PAN en sus dos sexenios aletargados iniciado el siglo XXI.
Pero ya la saben: la inquina reaccionaria indica que AMLO los va a usar con fines electoreros cuando, para las elecciones de 2024, Morena lo que va a hacer es adelantar el apoyo como lo ha hecho en lo que va del sexenio, y de a como sea se verá electorero: cuando se daba luego de la elección -era neoliberal-, se decía que si perdía en determinado distrito el partido gobernante, dejarían de llegar esos apoyos.
El punto es que mal mirado, es otra de las tantas formas de explotar la pobreza pues, desde luego, en la idea de a cómo los han tratado, en los municipios siguen con esas manipulación de los listados, «del institucionalismo al partido» gobernante, y reportan que hay funcionarios que a la hora de entregar los programas -de manera directa, eso sí- aprovechan para promocionar su imagen, cosa que debería verificar sea el IEyPC o la Secretaría de Bienestar -que da el varo- para que el piso esté parejo, y más ahora en que AMLO pidió a los gobernadores de Morena que todo aspirante a la presidencia, tenga las mismas oportunidades en sus entidades, y eso va para que sea igual para todos los candidatos a los distintos puestos de elección popular, más ahora que, aprobadas por las cámaras de la unión, el Plan B electoral permite que los funcionarios públicos promuevan su imagen de manera transparente, pues antes de eso la ley impedía a los aspirantes en cargos de decisión, a promocionarse hasta que se dieran los tiempos de ley y haber renunciado al cargo, cosa que por ciento, buscará demandar el INE ante la corte, para regresar a lo de antes en que ese órgano, tenía todo el dominio de los tiempos políticos en el sentido electoral.
Ahora no, y en vez de aprovechar eso, es clara la animadversión existente en la militancia para con el que no apoyan, y el cómo a falta de una cultura política del debate -y la gente se identifique con algún candidato-, recurren a la inquina y denostación del tercero, en aras de generar desprestigio cuando, igual, “su gallo” lo tiene peor.
No se trata aquí de describir o destruir figuras, sino de exponer que la cultura política que se observa en este proceso electoral, es pobre, y en consecuencia se expresa como es, lo que igual incluye a los que pretenden ser candidatos, porque no se ve que pongan freno a sus respectivos seguidores, y la cosa es más insulto que propuestas, y bueno fuera que en vez de descalificar gente -porque es lo que hay en los partidos-, se mostrara lo bueno de cada cual, pues no en todo pueden ser malos.
