Semifinalistas a paso firme. América consiguió avanzar a la siguiente ronda superando 2-0 a León con una actuación que fue de menos a más.
Las Águilas lograron sacudirse la presión y volvieron a ganar un juego de Liguilla en casa, cosa que no sucedía desde hacía más de un año cuando golearon a Puebla, no obstante, el equipo mostró jerarquía y sacó la serie sin problemas.
Sin embargo, a la media hora del partido el amarillo de las camisetas se trasladó a las caras de los aficionados locales cuando Federico Viñas reventó el poste con un disparo de media distancia que provocó que a todo León se le ahogara el grito de gol.
Entonces las cosas volvieron a equilibrarse en media cancha con pocas llegadas en los arcos, la mayoría de ellas sin tanto peligro aunque, debido a que la clasificación estaba a un gol, el ambiente era tenso y de mucho nerviosismo.
Fue hasta la parte complememtaria y desde el manchón penal que Las Águilas lograron darle calma gracias a una ejecución de otro partido por parte de Julián Quiñones, quien le agradeció al Capitán, Henry Martín la oportunidad de cobrarlo.
A partir de ese momento los 30 minutos restantes fueron pura ovacion y aplausos para los locales, pues ya se habían sacudido la presión de estar a un anotación de la eliminación lo que les permitió jugar con más tranquilidad. Y entonces cayó el segundo, el que liquidó la serie a 5 minutos del final cuando Martín punteó la pelota en un segundo remate dentro del área, jugada casi siempre mortal.