La reciente toma de las instalaciones del DIF Chiapas por parte de burócratas sindicalizados está teniendo un impacto en cientos de personas en situación de vulnerabilidad en el Estado. Entre los afectados se encuentran personas con discapacidad, niñas, niños, adolescentes, adultos mayores y estudiantes.
Karina Martínez López, directora del DIF Chiapas, ha expresado su preocupación por la suspensión de servicios críticos vitales para la ciudadanía en situación de vulnerabilidad y emergencia. Señaló que las luchas laborales deben considerar que hay instituciones, como el DIF Chiapas, que proporcionan servicios de salud, alimentación y protección jurídica, los cuales requieren atención oportuna para salvaguardar la integridad de las personas.
La suspensión de labores ha interrumpido gravemente diversas operaciones esenciales:
• La Procuraduría de Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y la Familia ha detenido las llamadas de emergencia que brindan apoyo a víctimas de violencia familiar, abandono y casos de violencia homoparental.
• En el Centro de Rehabilitación, se han suspendido las terapias necesarias para personas con discapacidad temporal y/o permanente, importantes para su bienestar. Cabe mencionar que los pacientes no solo provienen de la capital del estado, sino también de otros municipios, haciendo un gran esfuerzo por continuar con su tratamiento.
• La expedición de certificados de discapacidad, esenciales para trámites oficiales, también se ha visto interrumpida.
• En la Escuela de Terapia Física, se ha pospuesto el examen de selección para estudiantes que buscan continuar su formación.
• Los pacientes que dependen del Fideicomiso «Una mano… una esperanza» para apoyos en su lucha contra el cáncer se ven afectados por la falta de servicios.
• En el Centro de Desarrollo Infantil, se suspendieron las actividades escolares de cientos de niñas y niños que reciben educación maternal y preescolar. Estos servicios son importantes, especialmente para las madres que trabajan y dependen de este apoyo para garantizar el cuidado y la educación temprana de sus hijas e hijos.
Además, se han visto afectadas las personas que acuden en busca de medicamentos, traslados médicos y apoyo con servicios funerarios.
Es fundamental que las instalaciones del DIF Chiapas permanezcan abiertas y operativas para continuar brindando servicios esenciales a las y los chiapanecos. La suspensión de estos servicios pone en riesgo el bienestar y la seguridad de muchas personas en situación de vulnerabilidad, incluyendo niñas, niños, mujeres, personas con discapacidad y adultos mayores.