Tubo de Ensayo, por René Delios ·
Allá por 2014, una desbandada de notables perredistas se dio por todas las entidades del país, de acuerdo a reportes de tabasco, Nayarit, Veracruz, Campeche y desde luego Chiapas, en que los militantes ni siquiera indicaban el por qué desertaban de las siglas del Sol Azteca.
Y es que no era necesario: ya se había dicho que tal situación podría registrarse, cuando López Obrador logró el registro de Morena, pero también hubo salidas como la renuncia del fundador Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, quien advirtió del cómo las llamadas tribus se habían adueñado de ese partido, que por una década fue de los que más se fortaleció y logró posiciones políticas.
Y es que desde que se permitieron las candidaturas externas, dentro de los partidos políticos las desbandadas empezaron a ser cosa normal, y como la convicción partidista dejó de ser indispensable, pues por decenas de miles dejaron al PRD, otros al PRI e incluso al PAN, y le dieron su voto al tabasqueño.
Por ahí algunos, ya vaticinan la desaparición del PRD.
Si la salida de AMLO fue un boquete por dónde se desangró el PRD, no falta mucho para que militantes de sus aliados hagan formal su cambio de siglas, a sabiendas que sus partidos son bisagra de Morena en las cámaras, y que sin ese apoyo nada más el PVEM, PES o PT, no son nada, aun dos de estos tengan aún gubernaturas.
Desde luego que para 2024 habrá personajes que se van a anexar a Morena, aun que al momento, como muchos hoy morenistas en 2018 y 2021, no han hecho oficial para cuándo, en la inteligencia de que son políticos y seguirán en la política, justificándose que siente “la necesidad de servir” sin importar las siglas.
Porque de que va a haber sorpresas “chapulinezcas”, ni dudarlo, y más para la presidencial que jala varo, gente, múltiples intereses, y más ahora que de lo que se trata es de desbarrancar a Morena, aún en la oposición no se vea con quien le van a hacer frente al partido marrón, a la 4T, a López Obrador.
Salvo salga del PRI, pues los priistas tienen de dónde proponer.
Incluso .como ningún otro partido- mujeres.
Pero igual ya es un partido mermado, con varios casos de renuncias, y además ya están acostumbrados a esas cosas desde tiempo ha, en que precisamente han vivido casos como los de Ezequiel Padilla, Miguel Henríquez Guzmán y el mencionado Cárdenas Solórzano que antes fue priista que perredista, desde hace más de veinticinco años en que se salieron del tricolor.
En los panistas, las cosas no llegan a inquietarlos, ya que han sufrido el éxodo de algunos de sus candidatos presidenciales, como fueron los casos de Pablo Emilio Madero y José González Torres, entre otros, sin que se alterara el orden de sus cosas.
Dos de los hijos de otro candidato presidencial de Acción Nacional también renunciaron a su militancia en ese partido, Manuel y Tatiana Clouthier Carrillo, hijos de “Maquío”.
Pero bueno, veremos qué pasa en las izquierdas, con estas renuncias al PRD que ya deben de estar preocupando en verdad a las estructuras directrices, pues no es cualquier cosa: en 2024 el PRD puede perder el registro.
Lo mismo puede pasarle al PT -el PES esta fuera- e incluso al PVEM, si militantes propios se pasan de plano a la mejor opción que es Morena con mucho, aparte de que esos dirigentes no renuncian solos; se llevan equipos, trabajo político, de cobertura, de ingeniería electoral, en fin.
E igual en el panismo hay fisuras, agotamiento en el ámbito estatal; en lo nacional pues ya se ha sabido de distanciamiento e incluso renuncias a la militancia, que no quieren decir un cambio de siglas o apoyo a otro proyecto, salvo uno independiente, que dado el cómo está en panorama electoral en el sexenio, es poco probable que fructifique.
Así que en estos tiempos de adelantamientos, también vamos a ver el salto de los chapulines, que como hemos visto parecen cada sexenio, sin rubor de su cinismo y oportunismo político.