Ciudad de México, 6 de junio de 2025. — La planta para producir mosca estéril con la que se combatirá la plaga del gusano barrenador, que afecta al ganado y otras especies, estaría lista para operar dentro de un año, estimó Octavio Carranza, especialista en sanidad animal y ex representante de México en el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA).
Como se anunció días atrás, México y Estados Unidos acordaron la renovación de dicha planta ubicada en Chiapas, con una inversión de 21 millones de dólares, y cuya meta será producir 100 millones de insectos estériles cada semana para combatir esta plaga.
Carranza detalló que, considerando la adecuación de la infraestructura y los procesos para criar y modificar los insectos por medio de rayos gamma, se calcula un periodo mínimo de un año para poner en marcha la operación de esta planta.
“El asunto es que primero hay que terminar la adecuación física de la planta, luego entrar a los procedimientos, en algún momento se hablaba de un proyecto de un año”, explicó.
Agregó que, por ejemplo, la planta de Moscamed en Chiapas, construida en 2021, tardó más de cinco años en completarse, aunque en este caso el objetivo es acelerar los trabajos, ya que se cuenta con una base previa.
Actualmente, la planta ubicada en Panamá, que atiende a toda Centroamérica y México, resulta insuficiente para hacer frente a la propagación de las larvas de gusano barrenador, por lo que se requiere con urgencia otra unidad productiva.
Carranza precisó que antes de ponerla en marcha, será indispensable producir la cepa adecuada de mosca, implementar los planes de dispersión por zonas y establecer un mecanismo de control para la liberación de los insectos, un procedimiento técnico complejo que debe ejecutarse con rigor.
“El proceso tecnológico tampoco es tan fácil: primero hay que tener las cepas, reproducirlas, alimentarlas, generar pupas y después irradiarlas”, puntualizó.
