En la Mira, por Héctor Estrada ·
Las denuncias y evidencias estuvieron en el “ojo público” al menos durante los últimos 12 años; sin embargo, fue apenas el pasado 29 de mayo, justo en medio de la controversia por el posible fin contractual con el ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez, cuando el relleno sanitario de la empresa Veolia (antes Proactiva) finalmente fue clausurado por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
El derrame de lixiviados desde el Relleno Sanitario de la capital chiapaneca ha sido un proceso contaminante solapado por las autoridades a lo largo de más de una década. Las denuncias de ambientalistas, ejidatarios y pobladores han desfilado en medios de comunicación e instancias gubernamentales, pero las respuestas han sido nulas.
Aunque los señalamientos públicos sobre la contaminación de afluentes tienen poco más de doce años en voz de activistas como Héctor Montesinos, fue en 2017 cuando pobladores y ambientalistas denunciaron la muerte masiva de peces dentro del río Pacú, en el municipio de Suchiapa, generando una inevitable alarma por la dispersión de sustancias tóxicas hacia toda la región.
El tema ha escalado también a organismos nacionales. Y es que, a principios de 2020 la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió la recomendación 03/2020 en la que llamó a las autoridades de los tres niveles a investigar el caso que, según el propio documento, podría estar vinculado a diversos reportes de cáncer dentro de comunidades cercanas a los afluentes contaminados.
Pero el llamado de atención más importante data de abril de 2019, cuando la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió medidas cautelares (bajo numeral 1498-18) a las autoridades mexicanas, principalmente al ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez, para detener la contaminación progresiva de los afluentes que, según expediente en manos del propio organismo internacional, estaba relacionada con la muerte pobladores en el ejido Emiliano Zapata.
En ese entonces, el expediente documentó el deceso de 21 personas, entre ellos 9 niños, a causa del desarrollo de diferentes tipos de cáncer entre los años 2006 y 2018. Sin embargo, pasaron los años y nunca se hizo nada definitivo para detener la contaminación de Veolia… Por el contrario, en 2018 y 2020 se favoreció a la empresa con contratos y recursos adicionales para nuevos proyectos de cobertura.
El asunto es un tema de suma preocupación que ha sido expuesto incontables veces, con casos alarmantes, como el del predio San Martín Mujular de Héctor Montesinos, quien por varios años ha denunciado el derrame progresivo de lixiviados sobre mantos acuíferos y arroyos de la zona, desatando una confrontación pública con autoridades locales que finalmente lo obligó a salir de Chiapas para proteger su vida.
Por eso la tardía clausura del relleno sanitario no sólo resulta positiva, sino también sorpresiva. Y lo es porque se da justo cuando se debate el fin del contrato de Veolia con Tuxtla Gutiérrez y la posible salida de la empresa de Chiapas parece inminente. Mientras tanto, hoy sólo resta esperar que las medidas tomadas contra la Veolia vayan más allá de los procedimientos parciales o temporales para terminar de una vez con el derrame de contaminantes y, en su momento, también se procesa con la respectiva reparación de los daños… así las cosas.
2 comentarios
Y Dónde está el Wero Velasco, Rutilio Escandón?? Buen protegidos por la 4T??? Más y éso se merecen por creer en esa gente de Morena y del Verde, PRI, PAN, etcétera..La Culpa es de esa gente borrega que corren. Darle su Voto a esa 🗑️ de Presidentes Municipales..Pero Eduardo Ramírez está preocupado por distraer a la gente con ésos cuentos de que son un Gobierno mejor..Y Porque No ha investigado a Rutilio Escandón?? Son iguales de Ratas todos esos..
y quién va a pagar los daños???, la afianzadora??? si es que hicieron conforme a ley??? ojalá se solvente la Dram SHEIMBAUM es especialista ojalá apoye dando una resolución al respecto es su especialidad verifiquen si tienen dudas al respecto. saludos