Playa del Carmen, Q. Roo.-La Unidad de Investigación Especializada en Delitos de Trata y Explotación de Niñas, Niños y Adolescentes rescató a 20 menores originarios de Chiapas y detuvo a dos personas por posibles ilícitos.
Los infantes, de entre y uno y 17 años de edad, permanecían cautivos en dos cuartos de una vecindad ubicada en la colonia centro de esta ciudad Playa del Carmen.
Según la Fiscalía General del Estado (FGE), los pequeños fueron “reclutados” en el estado de Chiapas y mediante engaños traídos a Quintana Roo.
“Les prometieron trabajo, una mejor vida y les dijeron que el dinero que ganaran se lo enviarían a sus padres o se los guardarían”, asentó la corporación al informar de cateos.
“Los reclutados trabajaban jornadas sin pago desde las ocho de la mañana hasta las 8 de la noche vendiendo en las calles marquesitas, raspados, cinturones y otros productos; no se les permitía tener comunicación con sus padres y cuando preguntaban por su dinero les decían que lo habían enviado a sus papás”, abundó.
De acuerdo con la FGE, las víctimas del delito de trata de personas en su modalidad de explotación laboral estaban “en malas condiciones, sucios, mal vestidos y con apariencia de desnutrición”.
Los afectados quedaron bajo resguardo del Sistema DIF de Solidaridad.
“En los cuatros cateados los agentes hallaron varios cuadernos que contenían escritos con nombres y diversas anotaciones; al término de la diligencia se colocaron los sellos oficiales, los cuales indican que el lugar está asegurado”, señaló la dependencia.
En un comunicado indicó que estas acciones se llevaron a cabo en colaboración con el Grupo de Coordinación para la Construcción de Paz y Seguridad de Quintana Roo.
Las intervenciones periciales se realizaron a partir de labores de investigación, campo y gabinete, así como por denuncias interpuestas por dos de los niños.
El martes 13 de junio, alrededor de las 19:00 horas en Mérida, en un cruzamiento de la avenida Líbano, en la colonia México, un niño chiapaneco de siete años de edad, identificado como Iker, fue atropellado mortalmente por una camioneta.
El fallecido, junto a otros menores, realizaba malabares para obtener unas monedas que entregaba a un adulto que los llevaba a esa zona.
A un mes del suceso el cuerpo de Iker permanece en la morgue, ya que no se ha podido encontrar a sus padres originarios de Chiapas.
