Chiapas, donde el ingreso no alcanza ni para lo básico
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 15 de julio de 2025.– Una vez más, Chiapas encabeza una de las cifras más duras y vergonzosas del país. De acuerdo con datos del INEGI, analizados por la organización México, ¿Cómo Vamos?, el 85.3% de la población en la entidad vive con un ingreso per cápita menor al necesario para cubrir lo más básico: la canasta alimentaria y no alimentaria. Es decir, más de ocho de cada diez chiapanecos no pueden pagar lo indispensable para vivir.
El dato, correspondiente al primer trimestre de 2025, ubica a Chiapas en el primer lugar nacional de pobreza por ingresos, seguido por Oaxaca (81.2%) y Guerrero (76.5%). La región sur-sureste, históricamente olvidada en términos de desarrollo estructural, vuelve a evidenciar la profundidad de su desigualdad.
A nivel nacional, el promedio de población en esta condición es del 64.3%, lo que significa que Chiapas supera por más de 20 puntos porcentuales la media del país. Una brecha que debería escandalizar, incomodar y, sobre todo, provocar acciones más allá de los discursos.
Porque mientras en entidades como Baja California Sur solo el 36.2% de su población se encuentra en esta situación, Chiapas más que duplica esa proporción. La comparación es brutal y deja claro que la estrategia basada únicamente en transferencias económicas, sin empleo formal suficiente, sin inversión en infraestructura, salud ni educación de calidad, resulta insuficiente.
Expertos en desarrollo social han advertido una y otra vez que el combate a la pobreza exige una intervención integral y sostenida. Si no se detiene la dependencia crónica de programas sociales, sin generar condiciones reales para la movilidad social, la pobreza seguirá heredándose de generación en generación.
Chiapas necesita más que estadísticas. Necesita voluntad, políticas de Estado, visión regional y una estrategia que ponga a su gente en el centro, no solo como destinatarios de apoyos, sino como protagonistas de su propio desarrollo.