Por Redacción / El Sol de Chiapas
Ciudad de México, 16 de mayo.- Por primera vez, una ciudadana mexicana ha sido acusada en Estados Unidos por brindar apoyo a una organización terrorista extranjera. Se trata de María del Rosario Navarro Sánchez, de 39 años, señalada por presuntamente colaborar con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
De acuerdo con el Departamento de Justicia estadounidense, la mujer enfrenta cargos por tráfico de armas, granadas, dinero y personas en beneficio de esta organización criminal, considerada una de las más violentas y poderosas en México y Latinoamérica.
Según documentos judiciales, Navarro Sánchez también formaba parte de una red internacional dedicada al contrabando de drogas y efectivo a gran escala. Junto a ella fueron imputados Luis Carlos Dávalos-López, de 27 años, y Gustavo Castro-Medina, de 28, ambos mexicanos, quienes habrían participado en delitos relacionados con tráfico de armas y narcóticos.
La detención de Navarro Sánchez se realizó el pasado 5 de mayo en Magdalena, Jalisco, durante un operativo en conjunto con autoridades estadounidenses, en el cual también se aseguró un arsenal de armas de fuego, dosis de droga y equipos de telecomunicación.
El director del FBI, Kash Patel, afirmó que este caso debe enviar un mensaje claro a quienes buscan aliarse con grupos de este tipo: “Serán buscados y sometidos al máximo rigor de la ley”.
Esta acusación se sustenta en la orden ejecutiva emitida durante el gobierno de Donald Trump, en la que se designó al CJNG y otros cárteles mexicanos como organizaciones terroristas extranjeras, lo que permite a Estados Unidos ampliar su marco legal para perseguir a sus integrantes y colaboradores.
El Departamento de Justicia adelantó que se preparan nuevas acusaciones por narcotráfico contra presuntos líderes del Cártel de Sinaloa y la facción Beltrán Leyva, en lo que consideran una ofensiva jurídica sin precedentes contra el crimen organizado mexicano.
