Tuxtla Gutiérrez, Chis., 28 ABR.-Las Instituciones de Educación Superior (IES) tienen una responsabilidad fundamental en el fenómeno migratorio: brindar apoyo educativo, fomentar la integración, impulsar la investigación y sensibilizar a la sociedad sobre los retos que enfrentan las personas migrantes. Así lo afirmó la rectora de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH), Fanny López Jiménez, durante su participación en la IX Asamblea Regional Caribe, Centroamérica y México de la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUALC).
El encuentro, realizado en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), reunió a representantes de diversas universidades de la región para fortalecer el diálogo académico y reafirmar el compromiso de las IES con la sociedad, además de promover la integración regional en materia de educación superior.
Durante el conversatorio “El papel de las Instituciones de Educación Superior”, moderado por el profesor Bernardo Bolaños Guerra, de la UAM Unidad Cuajimalpa, participaron también Odir Aarón Fernández Flores, rector de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras; Walter Mazariegos, rector de la Universidad de San Carlos de Guatemala; y Carlos Alvarado Cerezo, secretario general del Consejo Superior Universitario Centroamericano (CSUCA).
La rectora de la UNICACH, subrayó que México enfrenta uno de los contextos migratorios más complejos a nivel mundial, y que Chiapas, debido a su ubicación geográfica, es un territorio clave en el tránsito de personas migrantes.
En su intervención, López Jiménez destacó la participación activa de la UNICACH en el análisis de la crisis migratoria en el sur de México, mediante foros, congresos, investigaciones y publicaciones especializadas. Entre estos esfuerzos, mencionó el Coloquio «Movilidad y Desarrollo en la Frontera Sur de México» y la publicación «Migración, seguridad, violencia y derechos humanos. Lecturas desde el sur», coordinada por los investigadores Daniel Villafuerte Solís y María del Carmen García Aguilar, bajo el sello editorial del Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica (CESMECA).
Asimismo, coincidió con el rector de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, y con el resto de los participantes, en señalar que si bien las universidades han generado abundante investigación sobre migración, aún enfrentan el desafío de traducir estos conocimientos en un impacto social tangible.
Entre los retos pendientes, López Jiménez destacó la necesidad de transformar la percepción social sobre los movimientos migratorios, resaltando su potencial para fortalecer y enriquecer a las naciones y regiones involucradas.
“La universidad debe asumir un rol proactivo, defensor de los derechos humanos de las personas migrantes, promotor de su bienestar e inclusión educativa y laboral, y mantenerse en constante análisis y reflexión sobre las condiciones e impactos de los flujos migratorios en nuestro territorio”, concluyó.