En el Día Internacional de la Mujer, miles de mujeres marcharon en Tuxtla Gutiérrez para exigir resultados en la lucha contra los feminicidios
Tuxtla Gutiérrez, 8 de marzo de 2025. Este 8 de marzo, miles de mujeres se congregaron en las calles de Tuxtla Gutiérrez para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, alzando la voz en una protesta que exigió justicia y el fin de la impunidad ante la violencia de género. En un ambiente cargado de rabia y esperanza, las manifestantes denunciaron los feminicidios, homicidios y diversas formas de agresión que siguen siendo una realidad para las mujeres, desde la violencia física y psicológica hasta la económica y verbal.

El clamor central de la protesta fue la impunidad que persiste en los casos de feminicidio y violencia de género, y la falta de acción por parte del sistema de procuración y administración de justicia en Chiapas. Las participantes exigieron respuestas inmediatas de la Fiscalía General del Estado y del Poder Judicial, instituciones que, aseguran, han fallado en hacer justicia a las víctimas y sus familias. En su intervención, Yenifer Farrera, una de las voces más destacadas de la marcha, recordó a las víctimas como Jade, asesinada en el Indeporte en 2020, y Cassandra, desaparecida en 2022. “Marchamos por ellas, por todas las mujeres que no han tenido justicia”, afirmó Farrera, quien subrayó que muchos de los agresores siguen libres.

La protesta se transformó en un grito colectivo por las mujeres cuyos nombres fueron borrados por el silencio del sistema judicial, pero también por las que aún luchan por obtener justicia. Con pancartas que decían “Te prefiero feminista que violenta, que violada y muerta” y “Vivas y libres”, las manifestantes exigieron el fin de la violencia y el fortalecimiento de los derechos de las mujeres. La marcha culminó en la plaza central de Tuxtla Gutiérrez, donde cientos de mujeres, familias y organizaciones se unieron para continuar la lucha por una sociedad más justa, visibilizando las desigualdades y violencias que las mujeres siguen enfrentando día con día. “La justicia no es un favor, es un derecho”, concluyó Yenifer Farrera, con la firme convicción de que el camino hacia la justicia no ha terminado.
