Redacción / El Sol de Chiapas
Tapachula, Chiapas, 27 de julio de 2025
Tapachula vuelve a ser escenario de denuncias por violaciones a derechos humanos. Esta vez, trabajadoras sexuales señalaron ser víctimas de una red de extorsión, amenazas y abusos en pleno centro de la ciudad, específicamente en el parque central “Miguel Hidalgo”.
De acuerdo con la Red Mexicana de Trabajo Sexual y la organización Brigada Callejera, mujeres —en su mayoría migrantes— están siendo obligadas a pagar “cuotas” para poder trabajar en la vía pública. “A las compañeras extranjeras las amenazaban con migración para obligarlas a pagar”, denunció Maribel López, trabajadora sexual, en entrevista con el portal Sin Embargo.
Cristian Gómez, representante local de Brigada Callejera, aseguró que incluso se ha detectado a un presunto padrote que intenta controlar los horarios de trabajo en la zona, beneficiando exclusivamente a mujeres venezolanas. Mientras tanto, algunos comerciantes del centro han comenzado a recolectar firmas para expulsarlas, bajo el argumento de que “dan mala imagen”, a pesar de que ellas aseguran no causar disturbios.
Este caso no es aislado. Según las organizaciones, también se han reportado situaciones similares en Iztapalapa (CDMX) y Guadalajara, donde líderes de ambulantes, expolicías o incluso extrabajadoras sexuales controlan zonas y exigen pagos bajo amenazas, golpizas o represalias.
La abogada Arlen Palestina Pineda advirtió que la ausencia de una ley federal que regule el trabajo sexual propicia estos abusos, y lamentó que las denuncias presentadas no prosperen. De hecho, las organizaciones han documentado al menos 85 intentos de denuncia que terminaron en represalias para las víctimas.
El caso de Tapachula evidencia nuevamente la urgente necesidad de proteger los derechos humanos de las trabajadoras sexuales, especialmente aquellas en situación de vulnerabilidad como las mujeres migrantes.