El presidente del Comité Directivo Estatal del PRI en Chiapas, Rubén Antonio Zuarth Esquinca, advirtió que el tricolor votará en contra de la iniciativa de Morena para expedir una nueva Ley General de Aguas y modificar la Ley de Aguas Nacionales, al señalar que el proyecto pone en riesgo el patrimonio de millones de familias y criminaliza el trabajo agrícola. “No vamos a permitir que destruyan décadas de certeza jurídica en el campo”, afirmó.
Zuarth explicó que la propuesta contempla multas que alcanzan los 7 millones de pesos y penas de prisión de hasta 12 años para productores que enfrentan irregularidades administrativas, lo que —dijo— convierte a agricultores, ganaderos y silvicultores en “presuntos delincuentes por sembrar y producir alimentos”. Añadió que el Gobierno Federal pretende legislar sin escuchar al sector rural, repitiendo una dinámica de imposición y opacidad.
Señaló además que Morena propone eliminar los títulos de concesión para sustituirlos por permisos anuales, lo que otorgaría al Gobierno Federal un control total sobre la distribución del agua, las tarifas, la infraestructura y hasta el derecho a regar los cultivos. “No es una reforma hidráulica: es un mecanismo de control político disfrazado de ley”, sostuvo el dirigente priista.
Zuarth advirtió que la prohibición de heredar, vender o ceder derechos sobre el uso del agua rompe con la estabilidad patrimonial que miles de familias campesinas han construido por generaciones. “El gobierno quiere borrar con un plumazo el esfuerzo de quienes han hecho del campo su vida entera. Eso es inaceptable”, enfatizó.
El presidente del PRI en Chiapas también alertó que los módulos y asociaciones de riego serían reemplazados por consejos designados desde oficinas federales, eliminando la participación de productores y desmantelando modelos de corresponsabilidad que han funcionado por décadas. “Centralizarlo todo no garantiza eficiencia; sólo garantiza control político”, dijo.
Finalmente, Zuarth destacó que el PRI ha realizado foros de escucha en Ciudad de México, Chihuahua, Campeche, Tabasco, Guanajuato y Aguascalientes, donde productores y sociedad civil coincidieron en rechazar la propuesta. “El PRI votará en contra de una iniciativa perversa que lastima al campo mexicano. Defenderemos el agua, la producción agrícola y el patrimonio de quienes sostienen al país con su trabajo diario”, concluyó.












