Altamirano, Chis., 07 de agosto de 2025.- El acceso a servicios médicos continúa siendo un desafío en regiones de alta marginación como Chiapas, donde, según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), más de 3.7 millones de habitantes carecen de atención médica, lo que equivale a 7 de cada 10 personas en el estado.
Ante esta realidad, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días realizó una donación al Hospital San Carlos, operado por Las Hijas de la Caridad a través de la Fundación de Obras Sociales de San Vicente I.A.P. (FOSSVI), con el objetivo de fortalecer la atención médica y el bienestar de pacientes en situación de vulnerabilidad.
El proyecto permitirá mejorar las condiciones de hospitalización y recuperación nutricional de más de 360 pacientes durante 2025, mediante la entrega de 12 camas hospitalarias, 30 almohadas, insumos para biometría hemática y apoyo alimentario. Se prevé que la donación beneficie principalmente a comunidades indígenas de Altamirano y de municipios cercanos como Chilón, Ocosingo, Sitalá, Salto del Agua y Oxchuc.
Gracias a esta entrega, se fortalecerá la operación del hospital mediante la instalación y mantenimiento de camas hospitalarias modernas, el suministro de insumos médicos para análisis clínicos y la provisión de apoyo nutricional a pacientes hospitalizados, todo bajo la supervisión y evaluación continua del personal médico.
Con casi 50 años de servicio, el Hospital San Carlos es el único centro de salud en la región adaptado culturalmente para atender a comunidades indígenas. Su experiencia y compromiso lo han convertido en un aliado estratégico para impulsar intervenciones humanitarias sostenibles, centradas en la dignidad, el respeto y la equidad.
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