Javier Domínguez
20 de noviembre de 2024
Tuxtla Gutiérrez
En Chiapas, solo 41 de los 124 municipios cuentan con plantas de tratamiento de aguas residuales, y de las 300 existentes, apenas 100 están en funcionamiento. Esta situación refleja una grave deficiencia en el acceso y calidad del agua para los habitantes de la entidad.
Según datos nacionales, menos del 35% de la población chiapaneca dispone de agua para uso cotidiano. Esto contrasta con el hecho de que Chiapas posee el 30% de los recursos hídricos del país.
La Asociación Civil Cántaro Azul advirtió que esta crisis hídrica provoca miles de muertes anuales por enfermedades diarreicas prevenibles. Mónica Olvera Molina, integrante de la organización, señaló: “Somos el segundo estado con mayor mortalidad infantil por enfermedades gastrointestinales recurrentes. Según el Plan Nacional, el 48% de estas muertes podrían prevenirse si la población tuviera acceso a agua segura”.
En las zonas rurales, donde reside el 51% de la población y se encuentran muchas comunidades indígenas, la situación es especialmente crítica. La falta de acceso al agua obliga a mujeres y niños a recorrer largas distancias para abastecer a sus familias, exponiéndolos a riesgos de salud y seguridad.
Además, Chiapas tiene el menor porcentaje de agua desinfectada para consumo humano en todo el país. Municipios como San Cristóbal de Las Casas, a pesar de ser un importante destino turístico, no cuentan con sistemas adecuados para tratar sus aguas residuales, agravando el problema.
Esta situación subraya la urgente necesidad de inversión y políticas públicas efectivas para garantizar el acceso al agua potable y la mejora de su calidad en la región.