Claudia Salazar y Martha Martínez
Ya empoderada como la responsable de construir el Frente Amplio por México (FAM) y en un proceso para mantener cohesionada a la Oposición, Gálvez se apersonó en la Cámara de Diputados como virtual candidata presidencial y tomó el mando de la batalla que viene.
Con el PAN, se acordó que fuera ella la oradora para dar el posicionamiento de su partido por el Quinto Informe de Gobierno de AMLO y el inicio del periodo de sesiones, mientras que PRI y PRD le expresarían su respaldo en la tribuna.
Antes de la apertura del Congreso General, Gálvez se reunió con diputados y senadores del PRI en la «Pecera», la sala de juntas que construyó en sus tiempos la profesora Elba Esther Gordillo.
«Necesito mucho a los priistas», fue parte de su mensaje, en una reunión donde los legisladores del tricolor se levantaron de sus asientos y gritaron «¡Presidenta!, ¡Presidenta!».
De ahí, a tomarse la foto de la unidad de los legisladores del FAM con la virtual candidata.
Una imagen mirando hacia arriba, con los dedos cruzados, el símbolo de la «X» de Xóchitl. Todos gritando «¡Presidenta!», «¡México, México!».
Los líderes partidistas Marko Cortés, Jesús Zambrano, Alejandro Moreno, y Santiago Creel, ya en su papel de coordinador de una campaña que ayer comenzó. Los coordinadores parlamentarios, todos los diputados, todos los senadores.
Gálvez caminó por la plaza cívica y los priistas la seguían para tomarse la foto y presentarse ante ella, como Gustavo Cárdenas, Ismael Hernández Deras, Frinné Azuara, Monserrat Arcos y Jazmín Jaimes.
Una Gálvez apresurada también se reunió con los legisladores del PAN, mientras la Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, esperaba a que iniciara la sesión para entregar el Informe de Gobierno.
«Voy a dar la batalla, estoy lista para esta lucha», aseguró Gálvez a panistas. Ya en el pleno, la senadora se preparaba para subir a la tribuna, repasando su discurso.
«¡Presidenta!, ¡Presidenta!», retumbó en el pleno y comenzó una guerra de porras que los morenistas no pudieron sostener.
Al grito de «Xóchitl» de la Oposición, desde las curules de Morena respondían «corrupta», «no va a cuajar, la gelatina no va a cuajar».
«Xóchitl, valiente, te teme el Presidente», «Marcelo, entiende, Andrés ya no te quiere», «Marcelo, aguanta, el pueblo se levanta», lanzaban burlones los panistas.
«Claudia, Claudia», surgió una respuesta menos fuerte, breve y que se diluyó; del otro bando salió un «¡uuuh!».
La titular de Gobernación entró al pleno y apuró su paso hacia la tribuna, desde donde enlistó logros, y recibió gritos de «fuera, fuera», «mentiras». Igual se fue rápido del pleno.
Luis Espinosa Cházaro, coordinador de los diputados perredistas, reconoció a Gálvez.
«Mención especial de una mujer valiente, una mujer indígena, una mujer trabajadora: Xóchitl Gálvez.
Decirte, Xóchitl, que no estás sola frente a los embates del misógino de Palacio de Gobierno. Aquí estamos las y los diputados, las y los senadores de la coalición Va por México», expresó.
La diputada priista Carolina Viggiano también dejó claro el apoyo de su partido a la hidalguense.
«No se olviden, México se escribe con equis y merece más. Arriba México», manifestó.
Llegó el momento estelar para Gálvez, quien en la tribuna reclamó los fracasos de la gestión de la Cuarta Transformación, que no hubo cambio sino destrucción.
«El estado que guarda la administración es trágico y deplorable. Pero, con el esfuerzo de todas y todos, pronto va a estar mucho mejor», dijo cuando los diputados de Morena abandonaban el pleno.
Recriminó los resultados en seguridad, acusó que los «abrazos» resultaron ser una ocurrencia criminal. «Se abraza a los delincuentes mientras balean a los mexicanos».
Reiteró que sí voto a favor de llevar a la Constitución los programas sociales, y aseguró que lo volvería a hacer.
«Les digo con el corazón: vamos a construir el México que soñamos y merecemos. Hoy la esperanza ya no le pertenece a la 4T, ha cambiado de manos, está de nuestro lado y no la vamos a soltar hasta lograr el sueño mexicano», concluyó, rodeada de los legisladores de las tres fracciones aliadas, cuando los legisladores de Morena tuvieron que regresar al pleno para posicionar.
Aleida Alavez, quien apoya a Claudia Sheinbaum, dedicó la mitad de su discurso a descalificar a Gálvez.
«Es legal lo que hicieron, pero completamente inmoral que vengan aquí a hacer un mitin de campaña en total fraude a la ley», acusó a la Oposición.
Aseguró que Gálvez se enriqueció, al mencionar los mil 400 millones de pesos en contratos obtenidos por sus empresas con particulares, y que, violando el secreto bancario y fiscal, dio a conocer el Presidente.
«Es una corrupta y lo vamos a decir hasta el cansancio. Esa es la bandera de Xóchitl Gálvez, la corrupción, y por eso se juntaron, para regresar a ese tráfico de influencias y que los abandere la corrupción, que es lo mejor que saben hacer», aseguró.
El discurso de la morenista ya no fue atendido por Gálvez, quien salió del pleno directo al aeropuerto para volar a Chiapas, donde este sábado encabezará una reunión con simpatizantes.
