Víctor Fuentes y Martha MartínezCd. de México (28 octubre 2022).- Con pendientes como la cobertura universal de salud y el abasto de medicamentos, el Gobierno federal echará a andar el «Sistema de Salud para el Bienestar», con un diseño similar a la operación de superdelegados y Servidores de la Nación.
La estrategia coincide con el arranque de las elecciones en Edomex y Coahuila, y en la antesala de la campaña presidencial.
El plan eliminará las actuales Jurisdicciones Sanitarias y se prepara un reordenamiento territorial con «Distritos de Salud para el Bienestar», que contemple densidad poblacional, tasa de mortalidad y extensión territorial, y deberán ser atendidos por brigadistas que tendrán que coordinarse para sus actividades con los Servidores de la Nación, de la Secretaría de Bienestar.
El Modelo de Atención a la Salud para el Bienestar (MAS-Bienestar), como fue denominado, crea una estructura que pretende dar atención y medicamentos gratuitos a la población, con base en figuras no previstas en la Ley General de Salud.
El modelo planea un Servicio Nacional de Salud Pública (SNSP), controlado por el subsecretario Hugo López-Gatell, que es definido como «brazo operativo» de la Secretaría de Salud.
Cada estado tendrá un coordinador del SNSP designado desde la Ssa. El sistema estará dividido en secciones de gerencia, operación, logística e inteligencia, y contará con «brigadas territoriales para promoción» que visitarán los domicilios, tal y como hacen los Siervos de la Nación.
Se prevén «asambleas comunitarias» para gestionar apoyos y acciones en materia de salud, así como «organizaciones comunitarias para la salud», integradas por voluntarios nombrados por la asamblea respectiva.
Esos grupos se deberán coordinar con los Centros Integradores de Bienestar y la estructura federal de delegados de Bienestar y Servidores de la Nación.
Los más de 10 mil Centros Integradores de Bienestar son locales donde el Gobierno federal atiende a 24 millones de beneficiarios de sus múltiples programas de reparto de dinero.
El especialista en salud pública, Octavio Gómez Dantés, anticipó que las brigadas se convertirán en estructuras para promover el voto.
«Estamos al final del cuarto año de la Administración y estas nuevas iniciativas son patadas de ahogado; ya no funcionó el proyecto de salud de la 4T y están haciendo todo tipo de intentos para salvar un poco de imagen», dijo.
Consideró que la propuesta de crear brigadas para promover la salud casa por casa son una buena idea, pero dijo desconfiar de ellas.
«No es una mala idea, pero en realidad están dirigidas a promover el voto. Van a cumplir su tarea: decir si sigues votando por Morena, te va a seguir garantizando servicios de salud, cuando ha sucedido exactamente lo contrario», sostuvo Gómez.