Guadalupe Alfaro Zebadúa, titular de la Secretaría de Salud Municipal de la capital chiapaneca informó que hay una extremadamente mala calidad del aire y advirtió a la población de los riesgos a la salud por la extremadamente mala calidad del aire.
Detalló que la mala calidad del aire que respiramos en la ciudad es provocada por las quemas agrícolas en los municipios aledaños e incendios forestales y que puede causar enfermedades respiratorias y complicar a quienes ya las padecen, por lo que es muy importante tomar medidas de prevención para estos casos.
“Lo hemos visto año con año, quemas forestales, normalmente son las mismas fechas, desde que empezó la administración lo hemos visto y lo hemos reportado. Protección Civil siempre está muy atento a estos incendios forestales que se ha dado pero los humos venían a estacionarse a nuestro municipio, quemaban en San Fernando, Villaflores, pero ahora tenemos el incendio del Mactumatzá con nosotros y por eso tenemos justamente la extremada mala calidad del aire en este momento”, sostuvo.
Por lo anterior, la funcionaria recomendó cerrar puertas y ventanas para impedir que el humo ingrese a los hogares, evitar las actividades físicas al aire libre y en la medida de los posible no salir a la calle para evitar la exposición prolongada al aire contaminado.
Asimismo expuso que la contaminación del aire puede provocar problemas del corazón, problemas pulmonares, irritación de ojos, nariz y garganta, además de que el sector poblacional más vulnerable es el de personas mayores, niños, jóvenes y adultos con enfermedades cardiacas o pulmonares y trabajadores al aire libre.
En ese sentido, agregó que la contaminación del aire puede provocar efectos dañinos en las mujeres embarazadas, como deficiencias en el desarrollo mental y motor, bajo peso al nacer, parto prematuro, mortalidad del lactante, retraso en el crecimiento pulmonar y riesgo de padecer asma entre otras más.
Para finalizar, Alfaro Zebadúa destacó que aunado a lo anterior y ante las altas temperaturas que se registran, se debe mantener una hidratación constante y abundante con agua, evitar las bebidas azucaradas o alcohólicas y acudir de manera inmediata al médico en caso de presentar síntomas de deshidratación, golpe de calor o descompensación en la salud.