Durante 2024, Chiapas se convirtió en el estado con más casos de desplazamiento forzado interno en México, con más de 17 mil 800 personas obligadas a huir por hechos de violencia ligados a grupos criminales. Así lo reveló un informe del Programa de Derechos Humanos de la Universidad Iberoamericana (PDH-IBERO), en colaboración con ACNUR.
El estudio indica que Chiapas concentró más del 60% del total de personas desplazadas en el país, producto de 20 eventos violentos ocurridos en distintas regiones, principalmente en la frontera con Guatemala, la Sierra Madre y Los Altos, donde se ha agudizado la disputa entre grupos armados.
A nivel nacional se contabilizaron 28,943 personas desplazadas en 72 eventos registrados en 13 estados, lo que representa un incremento del 129% en comparación con 2023. El 79% de los casos fue consecuencia directa de violencia, incluyendo ataques armados, amenazas, asesinatos y enfrentamientos.
En Chiapas, muchas personas abandonaron sus casas, tierras y pertenencias ante incursiones armadas, sin posibilidad de regresar. El reporte advierte que no hay un registro oficial confiable, lo que dificulta dimensionar la gravedad del fenómeno y diseñar respuestas adecuadas.
El informe también señala que muchas víctimas se desplazaron a otros municipios de Chiapas, otros estados e incluso a localidades en Guatemala, ante la falta de protección institucional.












