Un equipo arqueológico internacional, con apoyo del INAH, descubrió lo que podría ser la antigua ciudad de Sak-Bahlán, último refugio de los lacandones rebeldes en la selva de Chiapas. El sitio, ubicado cerca de los ríos Jataté e Ixcán dentro de la Reserva de la Biosfera Montes Azules, fue identificado mediante un modelo predictivo basado en Sistemas de Información Geográfica (SIG) desarrollado por el investigador Josuhé Lozada Toledo.
Sak-Bahlán, también llamada la “tierra del jaguar blanco”, fue el reducto final de los lacandones-ch’olti’es, últimos mayas que resistieron la conquista española hasta principios del siglo XVIII. Tras ser abandonada en 1721, la ciudad quedó oculta bajo la selva hasta ahora.
El hallazgo es resultado del Proyecto Arqueológico Sak-Bahlán, codirigido por Brent Woodfill y Yuko Shiratori, y respaldado por el Consejo de Arqueología del INAH. Durante dos temporadas de campo, el equipo ha cartografiado el sitio y realizado sondeos para definir su ocupación histórica.
Este descubrimiento ofrece nuevas perspectivas para comprender la resistencia maya en Chiapas y une evidencias históricas con tecnología moderna, revalorizando la memoria cultural de los pueblos originarios en la región.
