Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. La precariedad en el acceso a servicios de salud en Chiapas continúa siendo una problemática grave. Según el análisis de la Dirección de Información Geográfica y Estadística de la entidad, el 82.68% de la población económicamente activa ocupada (PEAO) no cuenta con afiliación a servicios de salud, lo que equivale a casi dos millones de personas en esta situación.
En comparación con el año pasado, el número de personas sin acceso a estos servicios aumentó en 24 mil 642, evidenciando un deterioro en las condiciones de seguridad social en el estado. Aunque al contrastar los datos con el segundo trimestre de 2024 hubo una leve disminución de 6 mil 194 personas, la magnitud del problema sigue siendo alarmante.
Chiapas, además, enfrenta otro desafío estructural: una tasa de informalidad laboral (TIL) del 76.08%, lo que representa 1.6 millones de personas que trabajan en condiciones precarias, sin prestaciones sociales ni garantías laborales. Este porcentaje aumentó un 0.69% respecto al año anterior, mostrando un retroceso en los esfuerzos por formalizar el empleo en la entidad.
En términos de la población económicamente activa (PEA), que incluye a quienes trabajan o buscan trabajo activamente, el estado reportó 2 millones 230 mil 42 personas, es decir, el 53.75% de la población en edad laboral. De este grupo, 2 millones 186 mil 113 personas están ocupadas, ya sea en empleos remunerados o no, lo que representa el 98.03% de la PEA.
A pesar de estos indicadores aparentemente altos de ocupación, los bajos ingresos y la falta de seguridad social son una constante. Una gran proporción de los trabajadores se encuentra en el rango de quienes perciben hasta un salario mínimo o, peor aún, no perciben ingresos formales, lo que agrava la desigualdad y dificulta el acceso a servicios básicos como la salud.
Estos datos reflejan la necesidad urgente de implementar políticas públicas que no solo formalicen el empleo, sino que también garanticen el acceso a la seguridad social y la salud para la población chiapaneca. Sin estas medidas, millones de personas seguirán en una situación de vulnerabilidad que compromete su bienestar y desarrollo.