Cada relación de pareja es un mundo completamente aparte. Desde los sentimientos que allí se generan, hasta las actividades (importantes o no) que se hacen junto a esa persona.
Es por ello que nos atrevemos a afirmar, que a pesar de que puedas tener muchas relaciones amorosas a lo largo de tu vida, ninguna va a ser igual a la anterior. Y mucho menos a las relaciones de los demás.
En este sentido, el sexo es una de esas actividades que son fundamentales en el mundo de la pareja. Es este acto de amor y lujuria una parte crucial en cualquier relación amorosa, siendo la cama uno de los lugares donde fácilmente se pueden dirimir los problemas y un punto de reconexión que siempre debe estar presente en la pareja.
Si lo piensas bien, la actividad sexual que tienes con una pareja determinada nunca va a ser la misma que tengas con otra. Pero, ¿te ha tocado pasar por una relación amorosa a distancia? Y si ese es el caso, ¿recuerdas cómo eran sus relaciones sexuales?
La gente de JOYclub tiene ideas geniales para una sexualidad amplia y divertida, pero si quieres consejos concretos de cómo mantener viva la llama en una relación a distancia, estás en el lugar correcto. Ya sea porque acabas de iniciar alguna o porque simplemente te interesa el tema, presta mucha atención al siguiente artículo.
¿Lo básico? El amor
Si quieres saber si se puede tener relaciones sexuales a la distancia, pues sí, claro que se puede, pero si quieres que una relación amorosa funcione con normalidad y que los encuentros íntimos sean placenteros y productivos, entonces primero lo primero:
Las relaciones a distancia suelen tener una mejor suerte cuando ya conoces a la persona presencialmente. Es decir, cuando ya tienes tiempo con tu pareja en una misma ciudad y gozan de una unión estable.
De esta manera, la madurez y los sentimientos de esa relación suelen ser mucho más fuertes, lo cual es fundamental para tener éxito a largo plazo. En este sentido, es el amor y la intensidad con la cual éste se manifiesta, el elemento básico para que las relaciones sexuales de este tipo puedan ser realmente provechosas.
La satisfacción sexual no solo se logrará con un “orgasmo virtual”, sino con la combinación de este, sumado a un fuerte sentimiento de amor hacia el otro. Un sentimiento que intensifica las ganas de volver a reencontrarse con la pareja físicamente.
Ojo, esto no quiere decir que las parejas que se conocen a través de la red y nunca han estado físicamente juntos tengan que fracasar obligatoriamente por el factor distancia. Pero se requiere de mucha madurez y compromiso para poder sostener una relación de este estilo con alguien a quien nunca se ha tocado o sentido.
Y aunque esto puede resultar de cierta manera subjetivo, ya que cada relación de pareja es un mundo, como ya se ha mencionado, sí se hace evidente que dos personas que ya hayan compartido un mismo espacio e intimado, puedan conocerse mejor y llevar sus relaciones sexuales a la distancia al siguiente nivel.
Así que añádele un toque de amor y sentimientos a tus encuentros sexuales con tu pareja a distancia, y verás como la llama comienza a reactivarse.
4 cosas que no pueden faltar cuando tienes intimidad con tu pareja a la distancia
Ahora bien, tengas o no lo básico para mantener intimidad con tu pareja a distancia, los consejos que presentamos a continuación no deberían faltar en tus encuentros sexuales.
La comunicación
La única forma de saber qué le gusta o no a tu pareja, y más cuando estás a la distancia, es mantener una comunicación fluida acerca de sus intereses y gustos dentro del sexo.
Ya que no están físicamente juntos y no pueden experimentar en la oscuridad de la habitación, lo mejor para el sexo a distancia es dejar claro desde el día uno qué les excita y qué no.
Ya sean los nudes, el sexting, el sexo telefónico o las videollamadas, por ejemplo, todo debería hablarse, de esta manera se pueden conocer más detalles de los gustos del otro y enfocarse en eso que realmente los activa.
La picardía de los nudes
Esta época está dominada por la tecnología de los dispositivos móviles. Todos tienen acceso a una cámara dentro de sus smartphones y la posibilidad de mandar fotos o videos a través de las distintas aplicaciones de chat existentes.
En este sentido, fotografiarse y mandar los famosos nudes a tu pareja es una forma genial para iniciar o mantener la intimidad a la distancia. El uso que le des a tu cámara dentro del sexo es casi ilimitado, aquí la clave es conocer bien qué le excita al otro y mantenerlo siempre interesado.
A veces una imagen vale más que mil palabras, así que piensa bien de qué forma puedes encender a tu pareja (juego de roles, lencería, fetiches), y organiza tu mejor sesión de fotos.
Las videollamadas
Similar a lo que fue en su momento el sexo telefónico, las videollamadas son el elemento perfecto para disfrutar en vivo y directo de la sexualidad de tu pareja.
Aquí las posibilidades son ilimitadas, ya que la pareja se puede observar y escuchar mutuamente durante el tiempo que desee. De esta manera, estando los dos en total privacidad, pueden dejar volar la imaginación para utilizar los sentidos involucrados (vista y oído), ¿y por qué no?, usar también los demás sentidos que por obvias razones no son protagonistas (gusto, tacto, olfato).
De cierto modo, este sería el elemento que más se acerca a estar físicamente con una persona, ya que lo único que los separa en ese momento de intimidad es la pantalla de un smartphone o de una computadora. Si estás pensando en un encuentro sexual a distancia “más directo”, no dudes en acordarlo con tu pareja y llamarla.
Los juguetes
No te asustes, los juguetes sexuales son elementos cada vez más populares dentro de la intimidad de pareja. Estos pueden ser un complemento perfecto dentro de tus nudes o videollamadas.
Incluso existen algunos de ellos que pueden usarse y controlarse a la distancia, lo que añade cierto toque de realismo a la intimidad, solamente con tener la app adecuada, ya podrías comenzar a influir de una manera “más directa” en el placer de tu pareja. Los juguetes existentes y las posibilidades de qué hacer con ellos son enormes, solo es cuestión de explorar y experimentar hasta encontrar aquellos con los cuales se sientan cómodos.