Madres y padres de familia tsotsiles de la escuela primaria «Benito Juárez», en la comunidad San Antonio del Monte, a 10 minutos de esta ciudad, quemaron unos mil libros de textos gratuitos porque en estos se reconoce la diversidad sexual y el comunismo.
«No beneficia nada estos libros. Hablan de comunismo, lesbianismo, prácticamente no enseñan nada», dijo un hombre, mientas otro pateaba los libros.
«Es para el bien de los niños que no aprendan cosas así, lo que es cambiar de sexo, que un niño que vaya creciendo y que vaya a ser niña o que una niña quiera ser niño, que no vaya con su género», dijo un padre de familia que no quiso dar su nombre desde la cancha de basquetbol de la escuela, luego de la quema de los libros.
Horas antes del incendio, madres y padres de los 450 alumnos de la primaria, y hasta habitantes que también fueron invitados, celebraron una asamblea en la que decidieron que no querían los nuevos libros de texto gratuitos y que usarán los viejos.
Citaron a los directivos para informales de la decisión y estos, a su vez, contestaron que la respetarán, pero que firmaran un documento de los hechos. Inmediatamente, los padres fueron a la dirección del plantel por las cajas de libros, los cuales llegaron esta semana y que en su mayoría no habían sido usados.
En San Antonio del Monte, más de la mitad de sus habitantes profesan la religión cristiana, hablan tsotsil y se rigen bajo usos y costumbres. Esta es una de tantas localidades indígenas que se formó en las orillas de San Cristóbal de las Casas, provenientes de otros municipios de los Altos de Chiapas.
«¡Que se queme, que se queme!, ¡queremos libros anteriores no porquerías, son basura!», gritaban los habitantes cuando el fuego empezó a consumir los libros, mientras algunos niños y niñas miraban sin opinar.
«Toda la localidad lo decidió, son menores de siete y ocho años, no están en edad de ir aprendiendo esto. Los directivos aceptaron nuestro acuerdo», dijo una madre de familia.
Otro habitante contó que planean usar los libros de textos gratuitos viejos, que son varias las comunidades de los Altos de Chiapas que no están en acuerdo, y que empezarán a mostrar su inconformidad.